¿CUANTO VALE EL METRO CUADRADO DE MI PROPIEDAD?
Muchos son los factores que influyen en el mismo, uno de ellos es el metro cuadrado.
Es importante entender la importancia de calcular el metro cuadrado y determinar el espacio ideal para tus necesidades y las de tu familia.
Un metro cuadrado, es una unidad estándar que ayuda a calcular el valor que tiene o tendrá una propiedad.
El valor metro cuadrado viene definido por:
• Los materiales utilizados en la construcción. Hay que incluir en este ítem desde lo que se usaron para hacer los cimientos, hasta aquellos materiales que se aplicaron para los acabados y revestimientos.
• La mano de obra de los trabajadores que intervinieron en la construcción.
• Puede sumarse en algunos casos el tiempo que tomó finalizar la obra.
• Pero sobre todo la zona donde esté ubicado.
El valor del metro cuadrado por zonas:
Al momento de comprar o vender una casa, es fundamental que puedas tener en cuenta el precio del metro cuadrado que se oferta en la zona, ya que esto va a influir directamente en la compraventa.
La cantidad de metros cuadrados:
Debemos tener en cuenta como están compuestos esos m2, habitaciones, jardín, garaje, azotea, etc y de la forma en que se distribuyen.
Acceso a lugares de esparcimiento:
Es bueno verificar que la ubicación de tu inmueble se encuentre cerca de zonas de esparcimiento, plazas, rambla, clubes, que te conecte con lugares cercanos a los que puedas acceder fácilmente y sin tener que recurrir en largos tiempos de transporte. Si está cercano a lugares de enseñanza, escuelas, liceos, facultades.
La ubicación del inmueble:
Como mencionamos anteriormente, el costo del metro cuadrado puede variar de acuerdo a la zona. Sin embargo, existen zonas dentro de la ciudad que pueden estar aledañas o cercanas a tu zona de preferencia y contar con costos más bajos y diferentes beneficios.
Los accesos de vías y el transporte:
Este factor es crucial, pues el acceso a vías principales y la movilidad, hacen parte de la calidad de vida a la hora de comprar o vender una casa, en casos donde el trabajo es de manera presencial el transporte del hogar hacia el trabajo se puede convertir en un dolor de cabeza.